El que diga que los champiñones son aburridos es porque no ha probado esta receta. La soja y el sésamo le dan un toque muy sabroso y aprovechamos el tallo verde de la cebolleta que tradicionalmente se tira y que está llena de nutrientes.
El uso medicinal de las setas es tan antiguo como su uso culinario. Las setas están repletas de vitaminas, minerales, fibra dietética, son fáciles de digerir y aportan pocas calorías. También contienen proteínas de alta calidad y compuestos bioactivos que inhiben algunos tipos de cáncer, virus y ayudan a regular el sistema inmune.
Este salteado rápido se puede preparar con cualquier tipo de hongo tierno como aperitivo, guarnición o cena exprés con un huevo duro.
CONSUME SETAS 4-5 VECES POR SEMANA
2 raciones /8 minutos
Ingredientes
- 300 g de champiñones o cualquier seta tierna
- la parte verde de 2 cebolletas
- aceite de oliva virgen extra (AOVE)
- aceite de sésamo (opcional)
- salsa de soja (baja en sal y sin azúcar)
- una cucharadita de semillas de sésamo crudo o tostado
- un diente de ajo
- una pizca de pimienta negra
- una pimienta cayena (solo para atrevidos)
Limpia los tallos de la cebolleta quitando las primeras pieles y dejando el interior más tierno y verde. Pica el ajo y los tallos en aros finos.
Corta los champiñones limpios en laminas gruesas.
En una sartén añade dos cucharadas de AOVE y pocha el tallo de cebolleta a fuego medio. No añadas sal. Esta receta no la necesita, cuando añadamos la salsa de soja será suficiente.
A los 3-4 minutos añade la pimienta negra, remueve. Sube el fuego y saltea los champiñones. Tienen que soltar el agua y estar ligeramente tostado por fuera y jugosos por dentro. No los hagas demasiado, sino te quedarán muy mustios.
Por último remueve todo con 2-3 cucharadas de salsa de soja y apaga el fuego.
Decora con un chorro de aceite de sésamo en crudo y unas semillas.
¡Listo! ¡Ya tienes tu deliciosos champiñones con un toque asáitico!
TIPs:
Puedes cambiar las semillas de sésamo por semillas de lino, cacahuetes o pistachos. También puedes sustituir el aceite de sésamo por aceite cacahuete o de pipas de girasol.
En lugar de tallos de cebolleta puedes usar ajetes tiernos o el verde de un puerro.
Al cocinar la pimienta negra ya tienes un toque ligeramente picante , pero si quieres un poco mas añade una pimienta cayena pequeñita desmenuzada con los dedos a la vez que la verdura. Lávate las manos inmediatamente después, si te tocas la cara no te volverás a olvidar de este truco. ¡Es fuego!
Puedes usar setas congeladas o setas deshidratadas dejándolas en agua la noche anterior siempre que estén bien escurridas antes de cocinarlas.
Busca una salsa de soja que no contenga azúcar. Desgraciadamente es muy común que contenga caramelo para oscurecer la salsa, no nos interesa nutricionalmente. Podríamos convertir un plato sano en uno que no lo es.
Personaliza tus setas. Disfruta dándole un toque único a tus setas. Son muy versátiles. Si varias el salteado con un poco de coco fresco, brócoli al vapor, arroz, zanahoria rayada, fideos o patatas cocidas puedes conseguir un plato distinto cada día.
Hola Sagrario, me alegro de que te guste. En el Aldi con los productos asiáticos suelen tener una salsa de soja que no lleva nada de azúcar y relativamente poca sal. Luego hay otra más baja en sal pero que lleva algo de azúcar, se llama Kikkoman ( con etiqueta verde) y la puedes encontrar en muchos supermercados.
Ya nos contarás que tal la experiencia y muchas gracias por el comentario.
vale, primero buscaré la salsa de soja baja en sal y sin azúcar, a ver si tengo suerte y la encuentro y luego me pondré manos a la cocina.
la boca se me hace agua!
gracias amiga.