Bombones de mandarina

La Navidad es tiempo de excesos, es un mantra que solemos aceptar con resignación. Pero no tiene porque ser así. Basta con planificar un poco y ser consciente de que te mereces alimentos de mayor calidad que los clásicos industriales que proliferan en estas fechas.

            Ten presente que el cuerpo necesita moderación continuada y que si quieres darte un capricho puedes hacerlo sin remordimientos de conciencia con alternativas naturales, saciantes, que regulan las funciones corporales y te llenan de energía. Un truco para no pasarse comiendo es saciarse con alimentos ricos en fibra como fruta, verdura y hortalizas. Aportan frescor y una infinidad de posibilidades sencillas en la cocina.

            La receta de hoy me encanta porque está buenísima, es sana, barata, fácil y muy vistosa para ofrecerle a tus invitados o llevar a los anfitriones de una cena. Con ella no llevas sólo un presente, también un buen mensaje.

            ¿Quién dice que comer rico no puede ser sano?  Aquí tienes la prueba.

LA FRUTA ES EL POSTRE MÁS SALUDABLE

Ingredientes

36 bombones / 15 minutos ( más 20 min. de refrigerado)

· 4 mandarinas (500g)

· 1/2 tableta de chocolate 85% cacao (50 g)

· 1 cucharadita de aceite de coco virgen extra (10 g)

· 20 pistachos crudos pelados sin sal (10 g)

· 2-3 gotas de esencia o extracto de vainilla

· 1 chispa de sal (menos de medio pellizco)

· 1 hoja de papel de horno.

            Parte el chocolate en trozos. Derrítelo en un bol pequeño al baño maría o en el microondas con cuidado de no quemarlo.

            Pela las mandarines. Retira los hilos y el exceso de piel blanca si la hubiera. Dispón los gajos en una bandeja de horno y reserva en la nevera.

            Pica los pistachos con un cuchillo en trozos pequeños. Reserva.

            Añade al chocolate el aceite de coco, la vainilla y la sal. Remueve. Cuando esté todo integrado, espera un par de minutos a que se densifique un poco. Si el chocolate está demasiado caliente no se agarrará a la fruta.

            Saca la bandeja del frigo. Baña cada gajos sumergiéndolo en el chocolate hasta la mitad, escurre y espolvorea los pistachos por uno de los lados. Deposítalos en la bandeja separados unos de otros y refrigera entre 20 y 30 minutos.

            ¡Enhorabuena! ¡Te acabas de marcar un capricho de lujo!

TIPs:

            Es preferible que las mandarinas estén frías para que el chocolate se fije mejor. Apresúrate a echar los pistachos antes de que el chocolate se fragüe.

            Para el baño María basta con llenar un cazo con dos dedos de agua y poner encima el bol donde vayamos a derretir el chocolate. Si  el diámetro del cazo es parecido al del cazo evitarás salpicaduras de agua.

            La sal es un potenciado de sabor muy importante para el chocolate, marca la diferencia. Pero sé sutil, no debe apreciarse ningún matiz salado sólo un chocolate más sabroso. A no ser que busques ese factor sorpresa y pongas la sal en lugar de los pistachos como topping.

            Asegúrate de que la Esencia o extracto de vainilla sea de verdad. Se trata de un líquido denso marrón muy amargo que viene en un bote de vidrio pequeñísimo de unos 2 centímetros. Es el concentrado de las semillas y se vende en establecimientos tradicionales. Es muy barato y dura mucho tiempo. En los supermercados lo que venden es Aroma de vainilla, un sucedáneo industrial de mala calidad que viene en un bote más grande y que no tiene nada de vainilla y encima es más caro. No es nuestro objetivo. Si no encuentras el extracto, puedes usar semillas de 1/4 de vaina directamente.

            Un chocolate saludable debe tener un contenido de cacao alto, a partir del 80%. El aceite de coco suaviza el potente sabor del cacao y ayuda a que se deshaga en el paladar.

            Los frutos secos más saludables son los crudos o tostados. Deshecha los fritos y/o salados.

¡ Ponte creativ@! Puedes sustituir los gajos de mandarina por uvas, palitos de zanahoria u otros tipos de fruta que tengas en casa o incluso hacer un mix. Si usas fruta seca como orejones, ciruelas pasas o dátiles ten en cuenta que tienen un mayor aporte calórico (toma menos cantidad). También el topping admite multitud de variantes como semillas de sésamo, pipas o coco rayado. Pero sobre todo no te olvides de una cosa mientras cocinas: diviértete y ¡DIS-FRUTA!