¿Quién ha dicho que no se puede comer rico y sano? Estas galletas son la prueba. No tienen azúcar, ni leche, ni harina, ni huevo, ni aditivos químicos y están riquísimas. Son la alternativa a las galletas industriales que tienen demasiada azúcar, harinas refinadas de mala calidad y mucha grasa vegetal hidrogenada nada saludable. Estamos de acuerdo en que quizá no ganen un concurso de belleza, pero empezarás a apreciarlas al ver la energía que te dan durante toda la mañana. A los niños les encanta hacerlas y la avena es uno de los cereales más baratos y completos disponibles.
Sustituye las galletas industriales por galletas caseras sin azúcar.
18 galletas pequeñas /12 minutos (+ 2 h hidratación previa)
Ingredientes:
· 200 g copos de avena ( 4 puñados)
· 2 plátanos maduros
· 1 puñado de uvas pasas remojadas 2 horas antes
· 3 dátiles remojados remojadas 2 horas antes
· 1 cucharadita de canela
· 1 cucharadita de vainilla molida (opcional)
· AOVE (aceite de oliva virgen extra)
Las uvas pasas y los dátiles tienen que estar remojados en agua previamente al menos dos horas antes.
Precalienta el horno a 160 C.
Pica los dátiles escurridos con ayuda de una batidora o picadora. Haz harina con un tercio de la avena ( 60 g o puñado y medio aproximadamente). 
Aplasta el plátano en un bol hasta lograr un puré. Agrega las pasas escurridas y el resto de ingredientes. Envuelve todos los ingredientes bien hasta que tengas una masa compacta y manejable. Úntate bien las manos con aceite de oliva para que no se te peque la masa y haz bolitas pequeñas del mismo tamaño. Aplasta las bolas y ponlas en una rejilla de horno.
Hornea unos 18-20 minutos hasta que tomen un tono dorado. Déjalas enfriar fuera del horno en la misma rejilla.
El resultado es una galleta tipo “campurriana” crujiente por fuera y blandita por dentro. Con un vaso de leche de almendra casero es una delicia. ¡¡A gozar!!
TIP:
Cuanto más maduros estén los plátanos más dulce salen las galletas. Si eres muy goloso puedes añadir otro dátil más.
A diferencia de las industriales y debido a sus ingredientes frescos no duran mucho tiempo. Dos o tres días como mucho. También se pueden congelar.
Personaliza tus galletas añadiendo los ingredientes que más te gusten, trocitos de chocolate negro, almendras, nueces, arándanos, coco rayado, cacao en polvo. ¡Sé creativo!