El Pesto es una salsa que se consigue al majar albahaca, piñones, ajo y queso parmesano con aceite de oliva. Es una joya de la cocina italiana de merecida fama internacional. Tiene un sabor potente por lo que hay que usarla con mesura (también por el precio de los piñones).
Ahora soy muy fan de esta salsa aunque mi primera experiencia en un restaurante italiano no fue muy acertada.Cuando la preparación es casera la película cambia del blanco y negro al color 3D.
Es un recurso de lujo para hacer cualquier aperitivo o comida improvisada si cuentas con ella en la nevera. Es una manera sencilla de enriquecer cualquier plato con los nutrientes que aportan sus ingredientes y además tenemos que aprovechar la gran suerte que tenemos en Valladolid de producir los mejores piñones del mundo.
La vamos a preparar sin queso porque resulta más ligera y siempre lo podemos añadir después al plato que queramos acompañar. Para conservarla sólo se necesita una cubitera que nos permitirá sacar porciones individuales del congelador cuando queramos utilizarla. ¿Estas listo para disfrutar del delicioso olor de la albahaca?
CONSUME PRODUCTOS LOCALES
20-25 cubitos /2-5 minutos/ cubitera
Ingredientes
- 6 g albahaca fresca
- 40 g piñones de Valladolid
- una punta de ajo (2-3 g)
- 160 ml aceite de oliva virgen extra (AOVE)
- 60 g queso parmesano (opcional)
- sal
Lava la albahaca y deja secar. Separa las hojas.
Modo rápido
Bate todos los ingredientes con la batidora y ¡Tachán! ¡Listo!
Si te apetece desestresarte puedes usar el modo tradicional y hacerlo en el mortero. Yo suelo hacerlo así porque me gusta mas la textura y disfruto con los olores. Comienza por majar el ajo acomodado sobre la sal, después las hojas y por último los piñones. Cuando tengas una pasta uniforme ve incorporando el aceite poco a poco hasta que todo quede ligado.
TIPs:
Para distinguir los piñones de aquí de los que no lo son mira la receta Nazareno, allí explico la diferencia.
Si quieres que las hojas de albahaca no se oxiden y conserven un verde intenso pon agua a hervir y escáldalas durante 3 o 4 segundos. Escurre bien.
Conserva la salsa en cubiteras en el congelador. Para usarla con pasta solo tienes que mezclar los cubitos con un poco del agua de cocción. Así tienes un rico plato de pasta en un pispás.
Usos del Pesto:
Acompañando pasta, pizza, patatas asadas o crudités.
Untado sobre pan con tomate y queso. Mezclado con pan rallado para gratinar canelones o pescado al horno. A mi me encanta sobre pisto o un huevo revuelto.
Personaliza tu pesto. Investiga un poco, por ahí hay mil recetas diferentes de pesto: con rúcula, espinacas, calabacín, con avellanas, de tomates secos…¡Pásatelo pesto! digo, pipa.